Luego pienso que debo de seguir una pauta, que cada libro nuevo no me conduce a otro ni me conduce a, por decirlo de una manera ciertamente psicopática, una realidad que sea, además real. Pero ahora no puedo evitar fijarme en los escaparates de las librería, y así la limpia portada de la editorial Caballo de Troya me sentó a leer toda la tarde.
Cierto encanto de leer sin esperar nada, solo por una intuición. Una novelita, lo pienso por la brevedad y por la levedad, no por la altura, que te divierte y te hace pensar sobre la realidad rara de nuestro tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario